EL EMPLEO, NUESTRA MAYOR PRIORIDAD

Artículo del Presidente de CEA publicado en el diario ABC

Tras diez meses de continuos procesos electorales en los que el ejercicio de la política ha estado supeditado al ejercicio de la búsqueda del voto, Andalucía no puede esperar más y necesita entrar en una nueva etapa en la que el empleo, su mantenimiento y la generación del mismo, sea una prioridad compartida por todos, para lo cual resulta imprescindible la aprobación de unos presupuestos que tengan al empleo como su más absoluta prioridad, abstrayéndonos de la convocatoria del próximo 20 de diciembre.

Los nuevos gobiernos que se han conformado en los últimos meses, tanto en el ámbito local, como en el regional, han respondido en la mayoría de los casos a acuerdos de investidura que no han previsto su continuidad en el tiempo y garantizar así una cierta estabilidad hacia el futuro, que tan necesaria resulta para el empleo.

Desde la Confederación de Empresarios de Andalucía apostamos por potenciar la modernización de nuestro capital productivo y humano, incentivar el desarrollo de las actividades productivas y empresariales en la región, y ayudar a incrementar la competitividad de nuestras empresas en los entornos globales y a que nuestra comunidad autónoma gane atractivo para la inversión productiva.

Para ello, la administración pública andaluza debe dar mayor protagonismo presupuestario a aquellos programas que se dedican a ampliar y mejorar nuestras redes de infraestructuras básicas, a favorecer el desarrollo tecnológico, la innovación y la formación en el ámbito de la empresa, a modernizar nuestros sectores más tradicionales, a respaldar la iniciativa privada en los sectores estratégicos para la comunidad, a impulsar nuevos sectores TIC, y, con carácter general, a fomentar la iniciativa privada y la cultura de empresa en Andalucía.

Para todo ello es, sin duda, necesario un compromiso con un equilibrio sostenible de las cuentas públicas, lo cual requerirá de un mayor esfuerzo por incrementar el ahorro público regional y reducir el gasto corriente, garantizando la producción y calidad de los servicios públicos básicos; pero, también, las políticas inversoras y de estímulo empresarial.

Desde un punto de vista sectorial, el mantenimiento y la generación de empleo requiere, entre otras cuestiones:

1. Dinamizar el sector de la construcción andaluza a través de la puesta en marcha de nuevos proyectos de inversión pública.

2. Articular una política agraria propia, que complemente las actuaciones financiadas con los fondos que vienen de Europa, y favorecer el desarrollo económico de las zonas rurales de Andalucía.

3. Promocionar la industria andaluza, con atención especial al desarrollo de procesos de innovación en su seno y la atracción de industrias tractoras hacia la comunidad.

4. Dotar con recursos suficientes las medidas de los futuros planes energético y minero, y apostar por la implantación de proyectos de inversión empresarial en el sector.

5. La promoción de la industria cultural andaluza con la redirección del incentivo para generar industria, y no sólo consumo, todo ello además en un entorno legal y social que contribuya a impulsar el mecenazgo.

6. Promover la modernización del sector comercial, así como su adecuada vertebración asociativa e impulsar la presencia de los productos andaluces en los mercados exteriores.

7. Un impulso equilibrado a los modos de transporte sobre la base de la eficiencia económica, asegurando el equilibrio económico y financiero de las concesiones de transporte de viajeros.

8. Dar un mayor respaldo a la promoción de la oferta turística andaluza, favoreciendo la financiación para su diversificación y la mejora de su calidad.

Con estas medidas, y otras muchas, adoptadas con el consenso necesario, esperamos que el empleo vuelva a resurgir en nuestra Comunidad Autónoma, a través de más y mejores empresas. Los empresarios estamos firmemente comprometidos con el progreso de nuestra sociedad. Entre todos, podremos lograrlo.

Javier González de Lara y Sarria