3 de febrero de 2021.
Impuesto de Patrimonio, un tributo confiscatorio y único en la UE.
La patronal andaluza respalda a su homóloga nacional y considera que este impuesto grava el ahorro procedente de rentas por las que ya se ha tributado con anterioridad a través de otras figuras impositivas. España es el único país en el que existe.
La Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA) se adhiere a la petición de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) al Defensor del Pueblo para que interponga un recurso de inconstitucionalidad contra el artículo 66 de la Ley de PGE-2021, que otorga una nueva redacción al artículo 30 de la Ley del Impuesto sobre Patrimonio. La patronal andaluza se suma así a la solicitud de su homóloga nacional para que la mencionada ley sea derogada o modificada, entendiendo que el Impuesto de Patrimonio podría vulnerar el principio constitucional de capacidad económica.
CEA hace suyo el sentir de CEOE y su presidente, Antonio Garamendi, sobre el carácter marginal del Impuesto de Patrimonio, que grava el ahorro procedente de rentas por las que ya se ha tributado antes. Tiene un carácter anómalo en el ámbito del Derecho comparado de la Unión Europea y sólo existe en España dentro de la UE. Su escasa recaudación se suma a su carácter confiscatorio, como sostiene el informe jurídico de CEOE y, por lo tanto, vulnera el principio de no confiscatoriedad que proclama el artículo 31.1 de la Constitución.
Los empresarios andaluces respaldan esta iniciativa en defensa de un sistema tributario justo, que tiene como límite al deber de contribuir al sostenimiento de los gastos públicos el principio de no confiscatoriedad, tal y como recoge la Constitución. Igualmente, apela a la labor del Defensor del Pueblo de supervisar que el cobro de los tributos y los procedimientos aplicables sean justos.
Presión fiscal sobre las empresas españolas
CEA subraya que la presión fiscal empresarial y la recaudación total procedente de las empresas es proporcionalmente mucho mayor en nuestro país que en el resto de la Unión Europea. La tributación sobre el patrimonio y las rentas altas también está por encima de la media de la Unión. CEA aboga por recuperar la sostenibilidad de las finanzas públicas con mayor eficiencia del gasto, pero no a través de subidas impositivas que comprometen el crecimiento. Una fiscalidad competitiva y homologada con el entorno europeo favorecería esta recuperación.
En este sentido, la patronal andaluza lamenta el impacto negativo que tendrán las medidas de carácter recaudatorio incorporadas en los Presupuestos Generales del Estado para 2021, así como otras normativas con un claro efecto en la actividad productiva y el empleo cualificado. Las empresas verán incrementada la presión fiscal que soportan en detrimento de su competitividad. En la grave coyuntura actual, las decisiones de carácter fiscal debieran orientarse a incentivar la actividad económica, empresarial y profesional, así como a lograr un marco tributario nacional más atractivo y acorde con el contexto económico global.