El Consejo ha aprobado unas Conclusiones en las que se establecen las prioridades de la UE en las Naciones Unidas durante el 77º período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas.
Las conclusiones se aprueban en un momento en que el mundo se enfrenta a uno de los mayores desafíos para la paz y la seguridad mundiales en décadas, la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania, que se suma a las fracturas y crisis geopolíticas existentes, como las provocadas por la COVID-19 y cambio climático.
En este contexto, la UE y sus Estados miembros recuerdan el carácter vinculante de la Carta de las Naciones Unidas en su totalidad y subrayan la universalidad de la Carta de las Naciones Unidas.
Además, la UE reafirma su convicción de que los principales desafíos de nuestro tiempo, por su naturaleza y alcance global, no pueden ser abordados por países que actúen solos, sino que deben abordarse juntos. Junto con sus socios, la UE y sus estados miembros no escatimarán esfuerzos para hacer del mundo un lugar más seguro para vivir para todos, defendiendo la democracia, los derechos humanos, el estado de derecho y asegurando la paz y la prosperidad.
El próximo año, la UE se centrará en defender la Carta de las Naciones Unidas y el estado de derecho, abordar las consecuencias globales de la agresión rusa contra Ucrania, promover el desarrollo sostenible y los derechos humanos, apoyar el acceso a una educación de calidad, fortalecer la seguridad sanitaria mundial y luchar contra el cambio climático, la pérdida de biodiversidad y la contaminación, así como dar forma a la agenda digital mundial.
Las crisis múltiples y a menudo superpuestas de los últimos años han puesto de manifiesto algunas lagunas importantes en la gobernanza mundial y subrayado la necesidad de modernizar y reformar las Naciones Unidas en vista de las fracturas geopolíticas cada vez más profundas.
Por último, la UE subraya la necesidad de cambios transformadores, para que las Naciones Unidas se conviertan en una ONU 2.0, que esté financiada de forma sostenible, sea más inclusiva, transparente y responsable, y, en última instancia, esté debidamente equipada para futuros desafíos y oportunidades.