13 de noviembre de 2018.
El Presidente de la Confederación de Empresarios de Andalucía (CEA), Javier González de Lara, ha recibido hoy martes la Medalla de Honor del Colegio de Abogados de Málaga, «por la importantísima labor que está realizando en la sociedad andaluza y malagueña en general».
Así lo aseguró el Decano del Colegio de Abogados de Málaga, Francisco Javier Lara, quien ha impuesto la medalla a González de Lara en reconocimiento también a su «constante» dedicación al ejercicio de la abogacía, a su defensa de la profesión y «a la importante labor que desempeña este colegiado como presidente de la CEA y la CEM.
El decano destacó que González de Lara es un «ejemplo de liderazgo, diálogo y perseverancia». «Su completa visión de la realidad malagueña y andaluza lo convierte en una de las personas más influyentes de nuestra tierra», ha apuntado, añadiendo que Málaga y Andalucía «necesitan tener más ciudadanos como Javier González de Lara, personas comprometidas con el desarrollo del territorio en el que viven, que trabajan duro para mejorar la calidad de vida de las personas».
González de Lara, por su parte, dijo tener «una deuda de gratitud», respondiendo al decano que «nunca es tarde, todo lo contrario». «Me siento muy feliz por el sentimiento de pertenencia y porque son los tuyos quienes te reconocen, lo que tiene un valor emocional y desde el punto de vista profesional».
González de Lara manifestó en su intervención que la paz social «es la infraestructura más importante de cualquier territorio» y he hizo hincapié en la importancia de la mediación para solucionar conflictos. En cuanto al papel de los empresarios, aseveró que Andalucía «necesita una sociedad que tenga en cuenta de manera prioritaria la empresa, ya que es el camino más eficaz para recuperar su fortaleza, favorecer la igualdad de oportunidades y propiciar un crecimiento integrador».
El presidente de CEA apuntó que los empresarios deben asumir un papel más activo: «No sólo debemos demandar cosas, debemos hacerlas», y mostró su convicción por el compromiso social de las empresas y por su trabajo para cumplir con los objetivos de desarrollo sostenible. Además, añadió que «el eje central de la gestión de las empresas son las personas».
