La compañía anunció que se une sin ánimo de lucro al esfuerzo conjunto de varias organizaciones y otras farmacéuticas para asegurar el acceso equitativo de las vacunas contra el COVID-19 y para inmunizar al menos al 20% de la población de cada país a finales de año. La iniciativa COVAX también continúa su investigación y se prepara para enfrentarse a nuevas mutaciones del virus.
Unos 40 millones de dosis de la vacuna contra el COVID-19 creada por la farmacéutica Pfizer serán entregadas a COVAX, la iniciativa de la Organización Mundial de la Salud para distribuir inmunizaciones de manera equitativa, en el primer trimestre de este año anunció su director este viernes.
Tedros Adhanom Gebreyesus anunció la firma del nuevo acuerdo al que también se añadiría el de otros 150 millones de dosis de la vacuna de Oxford y AstraZeneca, pendiente de ser aprobada por la Organización como segura y eficaz para el uso de emergencia.
“Juntos, estos anuncios significan que COVAX podría comenzar a administrar dosis en febrero”, aseguró el responsable de la OMS.
Tedros agregó que, con los acuerdos existentes, la iniciativa está en camino de administrar 2000 millones de dosis para finales de este año en los 190 países inscritos.
“Este acuerdo también abre la puerta a los países que estén dispuestos a compartir dosis de la vacuna Pfizer/BioNTech para donarlas a COVAX y apoyar su rápida implementación”, dijo, pidiendo una vez más que la comunidad internacional trabaje conjuntamente para garantizar la vacunación de los trabajadores de salud y las personas mayores en todo el mundo durante los 100 primeros días de 2021.
Agregó que el anuncio de Estados Unidos de unirse a la iniciativa, y los nuevos acuerdos significan que COVAX está “más cerca de cumplir su promesa”.
“Esto no solo es significativo para COVAX, es un gran paso adelante para el acceso equitativo a las vacunas y una parte esencial del esfuerzo mundial para combatir esta pandemia. Solo estaremos seguros en cualquier lugar si lo estamos en todas partes”, aseguró el doctor Seth Berkley, director ejecutivo de Gavi, la Alianza de Vacunas, que lidera la adquisición y entrega de COVAX.
El objetivo es proteger al menos al 20% de la población de cada país a finales de año. Aproximadamente 1300 millones de dosis se entregarán a los 92 países que las recibirán como donaciones ya que no pueden pagar por ellas.
«La pandemia de #COVID19 está fuera de control en muchas partes del mundo. Los gobiernos y la gente están entrando en pánico y nosotros compartimos su angustia», expresó Berkley.
Es momento de prepararse
La OMS lanzará este mes un “Portal de preparación de los países”, que permitirá a los participantes inscritos para recibir vacunas a través de donación presentar planes de vacunación y despliegue nacional.
Según la Organización, se trata de un paso vital antes de que COVAX pueda hacer las asignaciones, para garantizar que las dosis administradas puedan implementarse de manera efectiva y para identificar dónde, si es necesario, se necesita más apoyo.
“Estos acuerdos de compra abren la puerta para que estas vacunas que salvan vidas estén disponibles para las personas en los países más vulnerables. Pero al mismo tiempo que estamos asegurando las vacunas, también debemos asegurarnos de que los países estén listos para recibirlas, implementarlas y generar confianza en ellas», aseguró Henrietta Fore, la directora ejecutiva de UNICEF, agencia encargada de distribuir las vacunas.
La instalación COVAX proporcionará a las 190 economías participantes una asignación indicativa para fines de este mes de las dosis que recibirán en las primeras rondas de distribución de vacunas, esto proporcionará orientación provisional para que se preparen.
“Confío en que, con su experiencia y recursos, Estados Unidos dará un empujón a los esfuerzos globales contra la pandemia», expresó Fore.
Las mutaciones y por qué es importante continuar la investigación
Para cumplir con su objetivo de asegurar 2000 millones de vacunas seguras y efectivas en 2021, COVAX ha creado una cartera diversa de vacunas candidatas que mitiga el riesgo de que un producto falle en los procesos de desarrollo, producción o regulación, y garantiza la disponibilidad de productos adecuados para diversos contextos y entornos. Este trabajo continuará al ritmo para permitir un mayor suministro de vacunas adecuadas para su uso en una amplia gama de poblaciones y entornos en 2021 y más allá, explicaron los expertos.
“El progreso en el desarrollo de vacunas hasta ahora ha sido extraordinario y está claro que ahora estamos reuniendo las herramientas que necesitamos para poner fin a la fase aguda de la pandemia. Pero no podemos permitirnos frenar nuestros esfuerzos dada la velocidad con la que esta pandemia continúa causando estragos”, explica el doctor Richard Hatchett, director ejecutivo de CEPI.
Hatchett aseguró que la aparición de nuevas variantes de COVID-19 pone de manifiesto la necesidad de estar un paso por delante del virus al continuar invirtiendo en investigación y desarrollo de vacunas, específicamente para vacunas candidatas de próxima generación.
“Hay que estar preparados para los cambios de cepas y para asegurarnos de que tenemos las herramientas para satisfacer las necesidades de todas las poblaciones en todos los países a largo plazo», expresó.
Al respecto, la experta en vacunas, Katherine O’Brien, dijo durante la rueda de prensa que hay que reducir urgentemente los contagios para evitar que surjan más variantes que pudieran responder peor a las vacunas del COVID-19.
“Es demasiado pronto para saber si las vacunas son menos eficaces en alguna de las nuevas variantes», explicó.
Cepa en Inglaterra
Mientras se celebraba la rueda de prensa de la OMS, el primer ministro de Reino Unido dijo que la variante británica puede ser más mortal que la original. Los especialistas de la OMS no pudieron confirmar este punto hasta contar con más información, pero insistieron en la importancia de suprimir los contagios.
«Si la variante es más contagiosa, hay más casos y entonces hay más personas hospitalizadas. Si hay más hospitalizados y los sistemas están sobrecargados se producen más muertes porque los médicos están sobrepasados», expresó la líder técnica de la OMS para el COVID-19, la doctora Maria Van Kerkhove.